martes, 25 de enero de 2011

El Genio del Conocimiento.


El conocimiento en su plena energía, asume una dirección puramente objetiva, y el objeto es captado con toda claridad según su esencia mas intima. Pero en otros momentos, cuando el individuo genial se encuentra ocupado con su propia persona, sus fines y su destino, entonces todo ese exceso del conocimiento asume también una dirección subjetiva, y se dedica a iluminar los fines y destinos al servicio de la voluntad individual; entonces la desmedida energía de las capacidades cognoscitivas le muestra al individuo toda forma exageradamente vivaz, con colores chillones y de forma desmesurada, viéndolo todo de forma extrema; es entonces cuando la voluntad se ve impulsada excesivamente por tales representaciones  exageradas, de manera que cada estado anímico se expande desenfrenadamente, y cada movimiento de la voluntad se transforma en afecto; ahora bien, como en la vida hay mas cosas chocantes y molestas que agradables y deseadas, en él predominara la melancolía; ademas, una representación vivaz reprimira enseguida a otras, de manera que su humor cambiará muy rápidamente, saltando de un extremo a otro, tal como lo encontramos excepcionalmente en el Tasso. 
Nuestra concepción de la esencia del genio explica también la gran vivacidad de los individuos geniales, que llega a rozar la ansiedad; todo les afecta muy fuertemente, porque se les aparece en imágenes muy vivaces; difícilmente les basta con el presente, porque éste, por lo general, no llena su conciencia, al parecerles insignifcante; de ahi es infatigable impulsividad, esa incesante búsqueda de nuevos objetos dignos de consideración; a ello hay que añadir aún la exigencia, casi nunca satisfecha, de encontrar seres semejantes a ellos, todo lo contrario de lo que le sucede al individuo común, que se encuentra plenamente satisfecho con el presente cotidian, en el que se pierde por completo, encontrando por doquier seres que se parecen a él, y sintiéndose en la vida como si siempre estuviese en casa, lo que le dota de esa especie de adaptación a la vida cotidiana que se le niega al individuo genial.

1 comentario: